Tengo varias recetas de estas flores que se elaboran en
muchos rincones de España, incluido Sierra de Fuentes, mi pueblo. He utilizado
la de mi amiga Maruja y en su recuerdo.
Para su preparación utilizamos un molde, con forma de flor, que
venden en ferreterías o tiendas especializadas en menaje de cocina.
Ingredientes
- 250 mililitros de leche
- 2 huevos
- 170 gramos de harina
- Una cucharadita escasa de azúcar avainillado
- Un chorrito de anís
- Aceite suave para freírlas (quedan muy bien con aceite de girasol)
- Azúcar glas
- 500 gramos de miel (opcional)
- Crema pastelera (opcional)
Elaboración
- Ponemos en un bol la leche y agregamos poco a poco la harina tamizada, el azúcar avainillado y el anís. Utilizando varillas mezclamos todos los ingredientes.
- Batimos muy bien los huevos y los incorporamos suavemente a la mezcla anterior hasta conseguir una masa homogénea del espesor de unas natillas. La dejamos reposar una hora, como mínimo.
- En una sartén honda, ponemos aceite abundante y cuando está caliente, introducimos en ella el molde (dos o tres minutos).
- Sacamos el molde de la sartén, escurrimos un poquito el aceite y, con rapidez, lo introducimos en la masa, con cuidado para no impregnar el borde del mismo con la mezcla, en cuyo caso no se desprenden las flores al freirlas.
- Cuando vemos que en el molde queda pegada un poquito de masa, lo introducimos de nuevo en la sartén y lo movemos suavemente hasta que la flor se desprende.
- La dejamos hasta
que está dorada por los dos lados. Las colocamos sobre un plato, cubierto de
papel de cocina, para que absorba toda la grasa.
Las servimos:
- Espolvoreadas con azúcar glas.
- Rebozadas en miel caliente.
- Con crema pastelera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario